Como comente en un post anterior, estuvimos paseando por Londres en el año 2015, y entre algunas de las actividades que realizamos, fuimos al Tower Bridge o mal conocido como puente de Londres (solo para alcarar son dos puentes diferentes), a sacarnos unas fotos y también a conocerlo por dentro.
El Tower Bridge, es aquel puente colgante característico de la ciudad de Londres que se encuentra ubicado justo a algunos metros enfrente de la Torre de Londres y que habitualmente acostumbra ser el escenario de presentación de la ciudad cuando se realizan en la misma grandes eventos como las Olimpiadas o el Dia del Jubileo de la Reina.
El mismo fue construido en el año 1894 y es un puente colgante y levadizo de 244m de longitud. Su interior está abierto a los visitantes y las entradas se pueden comprar online aqui a un valor de £8.70 por adulto (el ingreso también está incluido en la London Pass).
Nosotros fuimos luego de visitar la Torre de Londres, y en ese momento no había mucha gente en el lugar para visitarlo. Cuando llegamos nos informaron que los elevadores que llevan hacia el museo, el mirador y la pasarela con piso de vidrio no estaban en funcionamiento y que si queríamos realizar la visita podríamos hacerlo subiendo los 66 metros por escaleras.
Como contábamos con el tiempo justo y no ibamos a quedarnos muchos dias más en la ciudad decidimos enlongar las piernitas, tomar coraje y ponernos en forma y subir las escaleras. El ejercicio valió la pena 100%, ya que las escaleras son una obra de arte de la era Victoriana para luego terminar en la pasarela de vidrio y mirador.
Antes de llegar a esta pasarela, habiamos pasado por una sala en donde se proyectaba un video explicativo con la historia de la construcción del puente y algunos datos infográficos del mismo. Ya en la pasarela pudimos observar vistas magníficas de la City de Londres y del Támesis en donde se encontraban algunos paneles indicando cuales eran los edificios que se podían observar desde allí a forma de guia orientativa.
Pero, sin lugar a dudas la mayor y mejor atracción de todas en esta pasarela fue el piso de cristal, que debo admitir por momentos me produjo algo de vértigo. Los guias que se encontraban en el lugar fueron muy simpáticos y les consultamos si era posible tomar algunas fotos recostados sobre el mismo, a lo cual nos respondieron que si, que era posible hacerlo.
Quien les escribe, no se animó a tanto y solo se dedicó a mirar y tomar fotos desde arriba. 😉 Aunque debo reconocer que me tuve que concentrar bastante para que no me agarrara un vértigo atack jajaja.
Luego de la pasarela el recorrido continuó por la antigua Sala de Máquinas, en la cual se muestra y explica el funcionamiento de las mismas, que hacen al mecanismo de brazos levadizos de este puente. Si bien hoy las máquinas originales continúan en funcionamiento, a las mismas se les hizo diversas refacciones para permitir que funcionen con energía eléctrica en lugar de con combustible o carbón.
En este cuarto de máquinas solían trabajar alrededor de 80 personas para poder mantenerla en funcionamiento.
Sin lugar a dudas la visita valió la pena, y les recomiendo que si tienen preparación física anímense a subir o bajar por las escaleras victorianas que es toda una atracción aparte.
Definitivamente, el Tower Bridge es el segundo símbolo de esta ciudad maravillosa en el Reino Unido que no hay que dejar de visitar cuando se esté por la ciudad.
XOXO,
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