221b de Baker Street en Londres. Para muchos de los fanáticos de los libros, peliculas o series de Sherlock Holmes, esta no es una dirección cualquiera. Es ni más ni menos donde el mejor detective del mundo y su ayudante el Doctor Watson vivieron entre 1881 hasta 1904.

La casa de Sherlock fue construida en 1815 y funcionó como una pensión desde 1860 hasta 1934, cuando finalmente cerró. Fue declarada por el Gobierno de Su Majestad como monumento arquitectónico e histórico hasta que la Sociedad Internacional de Sherlock Holmes decidió comprar la propiedad y transformarla en Museo en 1990.
Hoy se puede visitar todos los dias de 9:30hs a 18hs y la entrada cuesta 15 libras por Adulto y la misma se compra al lado del edificio de 221b en una pequeña tienda de recuerdos del Museo en donde se venden cerámicas, objetos de arte, figuras, bustos, grabados, libros, gorras, camisetas, etc. Vayan con tiempo porque hay fila para entrar al mismo. En lo personal, no encontré en la tienda ningún souvenir de mi agrado y los precios me parecieron elevados, pero el museo en si valió 100% la pena.

En la entrada se van a encontrar con una persona del Museo, personificado como un tipico policía londinense de época, quien les controlará los tickets y hará de entretenimiento mientras dure la espera.
Ya dentro del edificio se encontrarán con la típica escalera que conduce al famoso departamento del 1er piso en donde el famoso detective residía y trabajaba y por supuesto también a las estancias del Doctor Watson y de la Sra. Hudson en el segundo piso del mismo edificio.



Todo impecablemente decorado y ambientado de acuerdo a las informaciones detalladas y registradas en las memorias del Doctor Watson, los curadores de este Museo logran meter de lleno a sus visitantes en una de sus historias en un abrir y cerrar de ojos.


Lo que más me impresionó cuando estuve allí fue lo pequeño que es el lugar. Realmente me lo imaginaba mucho más grande (al menos la parte del despacho/sala), esto quizás pueda desilusionar a muchos y hacer el recorrido algo incomodo sobre todo si tratan de sacarse una foto sin gente (misión imposible).
En la exposición se pueden hojear libros, fotografías, grabados y periódicos de la época, además de una colección de objetos del detective y de sus casos y una selección de cartas que fueron escritas y recibidas por el mismo Holmes.
En lineas generales, el Museo me encantó, si son fans de Sherlock Holmes y van a Londres no pueden dejar de ir a este lugar.
Y obvio, no puede faltar la foto en la estación de subte homónima. 😉

XOXO,

Muy bueno.
Soy bastante fan de Sherlock, pero no entré.
Nos dio miedo pagar 15 libras y que no valiera la pena.
Terminamos comiendo en el Pizza Hut de la esquina 🙂
Si queres podes leer nuestro blog, donde tambien hablamos de Sherlock
https://travelporelmundo.com.ar/2017/02/09/london-calling/
saludos.
Ay que pena que no entraron!!! Esta buenisimo el museo. No faltará oportunidad!! Soy re fan de Sherlock yo también. Gracias por el link! Ahora lo miro. 😉